Analizar suba de presión tributaria o bajar la renuncia impositiva
La OPP advierte "callejón fiscal" para impulsar mayor gasto social
La OPP considera necesario generar espacio
fiscal para avanzar más con las políticas en educación, salud y
vivienda. Algunas opciones técnicas que maneja son revisar el gasto
tributario (renuncia fiscal) o incrementar la presión impositiva.
Marcela Dobal
El subdirector de la Oficina de Planeamiento y
Presupuesto (OPP), Jerónimo Roca, lo afirmó al disertar ayer en el XL
Seminario Internacional de Presupuesto Público, en el auditorio del
Sodre. Allí dijo que esa oficina tiene "propuestas sobre cómo generar
ese espacio fiscal" para lograr que el presupuesto "sea una herramienta
de desarrollo". Sin embargo, aclaró que esto tiene que trabajarse a
nivel político y ser discutido con "el Poder Ejecutivo, el Legislativo y
la fuerza política".
Aclaró que esta idea no es de cara a la próxima
Rendición de Cuentas, sino "a mediano plazo" que "es lo que la OPP tiene
obligación de mirar".
Roca señaló a El País que desde el ángulo técnico hay
varias opciones: aumentar la eficiencia de la recaudación, revisar el
gasto tributario (la renuncia que hace el fisco por exoneraciones
impositivas) y aumentar la presión tributaria. La primera de ellas
parece un camino difícil ya que las recaudaciones de la Dirección
General Impositiva (DGI) y del Banco de Previsión Social (BPS) tienen
niveles muy bajos de evasión. Las otras dos pueden discutirse a "nivel
político".
En tanto, al disertar más tarde en el mismo seminario,
el presidente de la República en ejercicio Danilo Astori, dijo que
existe "larga y rica evidencia mundial" que si bien la estructura de los
ingresos públicos y en particular el sistema tributario tiene que
guardar una coherencia esencial con los objetivos del desarrollo, "es el
gasto público social el que tiene mayor potencia de construcción de
igualdad".
El eje de la disertación de Roca fue que Uruguay
enfrenta un "callejón fiscal". Eso surge de que la ejecución del
presupuesto en los últimos siete años alcanzó a 24% del Producto Interno
Bruto (PIB), pero que "antes de pagarle al primer maestro" ya ocho
puntos porcentuales debieron destinarse a cubrir el déficit del BPS (5,5
puntos) y el pago de intereses de la deuda (2,5 puntos). Esa "rigidez"
deja un presupuesto disponible de solo 16% del PIB, indicó.
Si se compara ese presupuesto con el del resto de
América Latina "seguramente Uruguay caería a mitad de tabla" (porque los
demás países tienen poblaciones menos envejecidas), mientras que su
presión tributaria está en los primeros lugares. "Esto es un desafío
tremendo que habla entonces de un callejón", porque la agenda social del
actual gobierno y el próximo "es tan ambiciosa como impostergable",
agregó.
Se refirió esencialmente a la mejora y
universalización de los bienes públicos (educación, vivienda y salud).
El dos de OPP dijo que hace 30 años que no se revisa la línea de base
presupuestal, con excepción de la decisión de dar 4,5% del PIB a la
educación. No obstante, descartó que reasignando partidas se obtengan
recursos "suficientes para financiar esta ambiciosa agenda".
"Tenemos un problema de nivel", aseguró. "Ni siquiera
con la reasignación podríamos corregir el sesgo que tiene nuestro
presupuesto hacia los adultos y adultos mayores. Si uno mira el gasto en
salud, educación y protección social sumados, el 15% va para los niños
de 12 y menos años y más de 37% va a la gente de 65 o más años", dijo.
Roca remarcó el "estrés" que generan sobre el
presupuesto disponible los desafíos en materia social. Se refirió a que
programas destinados a la primera infancia como Uruguay Crece Contigo
requieren de otras políticas sociales "que le den más continente a ese
esfuerzo de acompañamiento".
En este sentido, mencionó la necesidad de
universalizar la cobertura educativa, ya que en los dos quintiles de más
bajos ingresos solo la mitad de los niños de tres años tiene acceso a
la educación y solo una tercera parte de aquellos con dos años tiene
cobertura. Sostuvo que el mercado no va a resolver ese problema, pero
que si el gobierno lo quiere universalizar se genera "un nuevo estrés
sobre el presupuesto disponible".
Ejemplificó que si del total de escuelas se
considera al 20% de peor contexto sociocultural y se estima el costo de
pasarlas a escuelas de tiempo completo, implicaría "un estrés sobre el
presupuesto" de unos US$ 200 millones en infraestructura más US$ 40
millones en carga docente. "Esto es aproximadamente un 10% más del
presupuesto que hoy tiene Primaria para remuneraciones y no menos de
tres veces más que las inversiones que hace Primaria", señaló. En
materia habitacional, Roca dijo que si se cerrara el déficit de 30.000
viviendas "implicaría que el presupuesto del Ministerio fuera
aproximadamente un 30% superior al actual; de vuelta, un estrés
presupuestal".
Tomado de El País digital: http://www.elpais.com.uy/economia/noticias/opp-advierte-callejon-fiscal-impulso-gasto-social.html
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